lunes, 31 de octubre de 2011

Agilización del desahucio de inquilinos

Es el tema del día. Mis clientes no hablan de otra cosa (uno hasta me ha llamado al móvil para charlar sobre ello). Mis compañeros no hablan de otra cosa. Tengo mi facebook, mi twitter y demás repleto de mensajes sobre "los diez días".
"Se va a agilizar el mercado de alquiler", "nadie tendrá temor a alquilar su vivienda", "los que viven de gorra lo van a tener más difícil", etc... etc...
Es verdad que hay profesionales del impago, y cualquier medida que contribuya a hacerles la vida imposible siempre es bienvenida, y que, aunque la situación económica de la la mayoría de las familias es precaria, los arrendadores de sus viviendas no son los obligados a paliar esta injusta situación (aunque personalmente conozco a varios que están siendo comprensivos con sus inquilinos), pero la entrada en vigor de la reforma procesal llega en el de los peor de los momentos.
Si bien es cierto que no debemos llevarnos a engaño y es prácticamente imposible desahuciar a nadie en diez días, también debería de haberse previsto un mecanismo de acogimiento (o de aval) para los casos en los que el impago no es voluntario, sino debido a la extrema debilidad de las economías familiares.
Porque me temo que van a pagar justos por pecadores.